Estuve en el último tiempo adentrándome en el mundo del
PSK31 y casi que es lo único que he hecho en radio. Quedé muy fascinado con este modo y puede comprobar todas sus virtudes.
Usando mi
FT-840, una interfaz hecha por mi y una netbook con el
software de código abierto fldigi he conseguido un gran número de contactos que, con mi dipolo para 10 metros a baja altura y una potencia de 40 W, en fonía hubiese sido imposible.
El
6 de abril de 2011, a las 22:21 hs UTC contacté con la estación
JQ1HDR de
Kazu en Japón en
28,120 MHz.
Tuvimos un corto diálogo, teclado mediante, donde me contó que no había sufrido grandes daños por el terremoto del 11 de marzo que sufrió este país y que tampoco fue alcanzado por el Tsunami ya que vivía cerca de Tokio y alejado lo suficiente del mar.
El diálogo lo seguimos via e-mail ya que las condiciones decayeron y por el monitor los caracteres comenzaron a llegaban espaciados, formando frases sin sentido.
Al otro día remití mi QSL a Kazu. Y hoy, a tan sólo
12 días de mi envío, encontré en mi buzón un sobre doblado al medio, como suele hacer sistemáticamente el cartero con mi correspondencia, con la hermosa QSL de respuesta de Kazu.
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Fig. 1. La QSL ilustrada con una puesta de sol en el Monte Fuji | |
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Fig. 2. Reverso de la QSL de JQ1HDR |
Al parecer, llega más rápido una carta simple al Japón que a cualquier lugar de Argentina. Y Kazu me a mostrado toda su caballerosidad al contestarme con su QSL. Costumbre que muchos radioaficionados de mi país parecen haber olvidado.